Cada etapa del desarrollo de tu pequeño necesita unas herramientas y unos complementos específicos. A partir del sexto mes de vida, cuando los niños se inician en la alimentación complementaria, se recomienda ofrecer agua al bebé en un vaso que sea resistente y cómodo para ellos. Si quieres fomentar la autonomía de tu peque, los vasos de aprendizaje son el paso intermedio ideal entre el biberón y el vaso «de mayor», y se aprovechan durante los primeros años de vida del niño o niña como vasito para la mesilla de noche o para tener agua siempre a mano en la zona de juegos.
Su ligereza, las dos asas de su diseño y la arandela de silicona que evita que el vaso se vuelque cuando el niño o niña intenta cogerlo y dejarlo sobre la mesa lo convierten en el complemento ideal para la alimentación complementaria. Está decorado con elementos inspirados en la naturaleza, es resistente al lavavajillas y apto para microondas.
Medidas: 7 x 10 x 11 cm