Fácil de poner y quitar, suave, seguro, cómodo… ¡este saco de dormir lo tiene todo! Además, su divertido estampado de caritas sonrientes hará que la hora de irse a la cama sea aún más especial. Es un gran aliado para evitar que los niños se destapen en sueños y pasen frío durante la noche, poniendo por delante su seguridad y confort: su diseño se ciñe al cuerpo de los más pequeños para evitar que la carita se hunda en el tejido, y la cremallera delantera cuenta con un protector para que no haya roces en la delicada piel de los niños y niñas. Cabe destacar que está elaborado con algodón orgánico y relleno de poliéster reciclado, es muy suave, ligero y transpirable: Tiene una puntuación TOG de 2,5 (la referencia que se utiliza para saber cuánto abriga una prenda infantil), por lo que si se combina con un body de manga larga es perfecto para temperaturas de entre 16-20 °C. Al contar con pies, facilita que el bebé se ponga de pie en la cuna o que pueda levantarse de su camita por si mismo, y que juegue bien abrigado en las primeras horas de la mañana.
Puede lavarse a máquina en un lavado para prendas delicadas a menos de 30 °C.
Talla: 98-104 cm.